
Cada vez son más frecuentes las actividades de autorización previa o presión directa sobre las indicaciones de diverso tipo que los médicos hacen a sus pacientes. Y ocurren en países con sistemas sanitarios de diferente estructura de aseguramiento, organización y gestión:
- En EEUU, los procesos de autorización previa de medicamentos y servicios se han intensificado en los últimos años, y una encuesta de la Asociación Médica Americana indica que están suponiendo un retraso en el comienzo de los tratamientos, e incluso su no iniciación.
- En Reino Unido, y con una clara intención de controlar el gasto sanitario, muchos de los organismos de contratación de servicios sanitarios, de los que dependen los presupuestos otorgados a los médicos generales, están optando por la creación de servicios específicos para la gestión de las derivaciones a especializada. El Real Colegio de Médicos Generales se opone a dicha medida, que interpreta puede llegar a deteriorar la calidad de la atención, y propone otro tipo de medidas para mejorar las derivaciones.
- Y ante esta tendencia, y el incremento de las bajas por enfermedad común, es lógico que los médicos franceses comiencen a anticipar presiones por parte de los organismos de seguridad social de su país, y sugieran que se revise la responsabilidad que las propias empresas tienen sobre este incremento.