
Los médicos residentes del servicio de urgencias del Hospital 12 de Octubre convocaron una huelga indefinida a partir del 30 de noviembre para protestar por la insuficiencia de médicos adjuntos para una adecuada supervisión de su formación. Mientras que los MIR luchan por conseguir una situación que garantice la calidad y seguridad de su atención hacia los pacientes, la prioridad de la Consejería de Sanidad va hacia otro lado: comprar seis robots Da Vinci.